Zabbar

Zabbar es uno de los pueblos más antiguos y grandes de Malta, surgido de Zejtun. Se estableció como su propia parroquia en 1615 y fue elevado al rango de Ciudad por el Gran Maestro Ferdinand von Hompesch en 1797, siendo también conocido como Citta' Hompesch. El arco triunfal en la carretera principal de acceso desde Paola, construido por los residentes como una puerta de la ciudad para conmemorar el evento, sigue siendo uno de los hitos más impresionantes de Zabbar. Sin embargo, a pesar de su tamaño, Zabbar todavía conserva su atmósfera de pueblo, con sus numerosos clubes sociales como bandas y clubes deportivos, y rodeado de campos cultivados e incluso de una pequeña franja de costa en el sureste de Malta.

Se cree que el nombre de Zabbar deriva del trasfondo agrícola de la localidad, ya sea de la industria de la poda (tizbor en maltés) predominante en la zona, o de la planta de Aloe Vera (sabbara en maltés). Algunos piensan que Haz-Zabbar podría ser una corrupción de Has-Sabbar (el pueblo consolador) ya que los peregrinos de toda la isla iban allí a rezar a su patrona, Nuestra Señora de las Gracias, por consuelo.

Visite la Iglesia de Nuestra Señora de las Gracias (1641-1660) para admirar la grandeza que refleja la devoción y el orgullo de la gente de Zabbar, que continuaron embelleciendo su iglesia con sus propios fondos. Esta joya arquitectónica está ricamente decorada, con una pintura principal de la Madonna y el Niño de Alessio Erardi, mientras que una famosa pintura de Mattia Preti se exhibe en el adyacente Museo del Santuario. VFGA, una abreviatura en latín de Votum Fecit, Gratiam Accipit, está impresa en muchas de las pinturas y artefactos encontrados en el Museo del Santuario, lo cual se refiere a las gracias concedidas debido a la intervención de la Madonna tal-Grazzja (Nuestra Señora de las Gracias) a quien muchos rezan fielmente hasta el día de hoy.

Si es posible, visite Zabbar durante la pompa de una de sus dos fiestas, una celebrada en honor a Nuestra Señora de las Gracias el primer domingo después del 8 de septiembre, y otra celebrada en honor a San Miguel Arcángel dos semanas más tarde. La primera es famosa por su peregrinación en motocicleta y bicicleta, que parte respectivamente de Mosta y Rabat. La rivalidad cultural entre las dos bandas del pueblo, la Società Filarmonica Maria Mater Gratiae (los Azules) y la Għaqda Madonna Tal-Grazzja Banda San Mikiel (los Verdes) es divertida de presenciar para los no locales.

Recorra el área conocida como Il-Misrah, caracterizada por una serie de calles sinuosas que definen el núcleo del pueblo. Es lo suficientemente bonito, pero también puede pasear más lejos para ver varios monumentos... el Monumento a los Caídos en la Guerra, el Monumento a Hompesch y el Monumento al Mons. Joseph Zarb en la Plaza Mediatrix; la estatua de Nuestra Señora de las Gracias y el monumento de la ex Presidenta de la República Agatha Barbara en la Calle del Santuario; el Monumento del Gran Maestro Ferdinand von Hompesch y la notable Plaza de San Jaime y el Fuerte de San Leonardo...

La historia de Zabbar es demasiado extensa para describirla en pocas palabras. Desde la defensa contra el imperio otomano durante el Gran Asedio, pasando por la dominación francesa y la era británica, Zabbar desempeñó papeles importantes y hay evidencia clara de ello, desde balas de cañón francesas todavía alojadas en las paredes hasta las numerosas fortalezas y baterías construidas por los británicos.

Más recientemente, el accidente de un avión Vulcan en 1975 en la calle principal del pueblo y en una escuela, que cobró la vida de solo un residente, es considerado nada menos que un milagro ya que el evento podría haberse convertido en un desastre nacional si una serie de eventos hubieran sido solo ligeramente diferentes. Naturalmente, este milagro fue atribuido a la patrona del pueblo, la Madonna tal-Grazzja.